El escándalo protagonizado por el Grupo Volkswagen en cuanto a emisiones contaminantes parece que ha llevado a que otros fabricantes de automóviles comiencen a replantearse el tipo de coches que quieren tener circulando por las carreteras. Es decir parece claro que se busca conseguir crear modelos cada vez menos contaminantes y una opción perfecta parece que es optar directamente por coches híbridos, eléctricos o incluso que utilicen hidrogeno. El problema es que no parece una solución a corto plazo, es decir no podemos pensar que de aquí a unos pocos años se pueda dejar de fabricar coches que funcionen con combustibles fósiles. Quizás por eso sí
nos parece realista la aspiración de Toyota Motor que ha fijado el año 2050 como la fecha en la que dejará de fabricar coches contaminantes.Toyota Motor pretende apostar por los híbridos, eléctricos y de hidrogeno
Toyota Motor ha manifestado su intención de dejar de fabricar coches que funcionen con combustibles fósiles para el año 2050 y que en ese momento
todos sus modelos sean híbridos, eléctricos o de hidrogeno. De esta manera conseguirían reducir las emisiones de dióxido de carbono en sus coches nuevos hasta en un 90% con relación a las que producían sus coches fabricados en el año 2010, todo un reto nada sencillo de conseguir sin lugar a dudas.
Toyota Motor el mayor fabricante junto al Grupo Volkswagen
No podemos pasar por alto que
Toyota es el mayor fabricante a nivel mundial junto con el Grupo Volkswagen, por lo que como parece evidente debía de reaccionar después del turbio asunto en el que se ha visto en vuelto el fabricante alemán quien ha reconocido que lleva años manipulando el software de sus vehículos para engañar a las autoridades acerca de lo contaminantes que son sus coches.
Parece que con este anuncio la compañía japonesa da la impresión de querer
desmarcarse de lo que está sucediendo, y mostrar que lejos de pretender engañar a nadie aspiran es a dejar de fabricar coches que resulten contaminantes. Sin duda un camino mucho más práctico.
Claro que esto no puede hacerse a corto plazo. Por ejemplo los vehículos eléctricos, los que para muchos son la opción real para un futuro a corto plazo presentan por el momento algunos hándicaps que parecen alejarlos de este ambicioso objetivo.
Por qué los coches eléctricos no son aún una realidad
Por ejemplo un asunto fundamental es la autonomía de esta clase de coches. Aunque son muchos los que anuncian vehículos que podrán estar sin repostar cientos de kilómetros, la realidad es que aún no se ha conseguido.
Además no hay suficientes puntos de recarga distribuidos por las ciudades, ni siquiera por aquellas más importante, y por si fuera poco estas recargas duran demasiado tiempo. Todo ello lleva a que los coches eléctricos no sean una opción práctica en este momento. Quizás pudieran funcionar en ciudad, pero solo los bolsillos más pudientes pueden permitirse el tener un vehículo para desplazarse por las zonas urbanas y otro diferente para recorrer largas distancias.
Por lo que se tiene que trabajar en esos tres puntos: mayor autonomía, más puntos de recargas y recargas más cortas. Cuando se cumpla este triple objetivo será el momento en el que los coches eléctricos puedan convertirse en realidad y no en una eterna promesa.
Los objetivos de Toyota Motor para los próximos años
No cabe duda que a partir de ahora Toyota Motor se centrará en conseguir lo que ya ha prometido que hará en el 2050, es decir eliminar los coches con combustibles contaminantes para ese tiempo.
Toyota Motor ha explicado con detenimiento en un documento en el que figura su plan de reducción de emisiones para los próximos años y que también incluye su desafío medioambiental para el año 2050, que
confía en aumentar hasta las 30.000 las ventas de coches de hidrogeno cada año, de todos ellas una tercera parte se realizarían en Japón. Tenemos que recordar que este tipo de vehículos solo emiten vapor de agua.
Para cumplir con este objetivo tiene previsto
incrementar la producción del Mirai que de momento está a la venta en Japón desde 2014 y que ha sido el primer vehículo de hidrogeno comercializado en serie. Se prevé además que pase de las 700 unidades anuales a las 3.000 para el año 2017.
También quiere que en
2017 se comience a vender el autobús de hidrogeno en Tokio, donde tiene como objetivo llegar a comercializar hasta 100 unidades para el año 2020.
Asimismo a partir del año
2020 pretenden vender cada año un total de 1,5 millones de vehículos híbridos anualmente en todo el mundo, lo que supondría un 20% más que en 2014 y reducir las emisiones de sus vehículos nuevos un 22% con relación a las que producían en el 2010.
Muchas metas, habrá que comprobar si las consigue.